Capullos de oro: una artista ha sorprendido al mundo
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Desde la antigüedad, el metal amarillo atrae la atención de los conocedores del arte. Muchos artistas utilizan el metal noble en sus obras, lo que da a sus creaciones un toque exquisito y elegante.
Lo mismo hizo Hubert Duprat, un artista francés nacido en 1957. Se hizo famoso por su obra original, que creó con la ayuda de insectos.
En la foto: larva de mosca Сaddis en un capullo dorado.
Una vez Duprat observó larvas de mosca Сaddis, insectos que se encuentran en casi todos los estanques y ríos. Los pescadores suelen utilizar estas diminutas criaturas como cebo para las truchas. Las larvas se arrastraban en el agua por las ramas y los guijarros, intentando construir capullos temporales. El artista tuvo una idea única que se convirtió en un gran proyecto.
Hubert empezó a trabajar con insectos en los años 80. Los encontraba en la naturaleza y los llevaba a su taller, donde les quitaba cuidadosamente las vainas (formaciones protectoras) y colocaba las larvas en recipientes.
Para construir capullos acuáticos, los insectos secretan seda de sus glándulas salivales, que utilizan para pegar todo tipo de objetos accesibles. El resultado es una construcción en forma de tubo. Duprat decidió aplicar esto en el arte y colocó las larvas en recipientes de cristal con pequeños trocitos de oro.
Al principio solo utilizaba partículas del metal noble, pero más tarde empezó a añadir a los acuarios turquesas, corales, ópalos, lapislázuli, perlas, rubíes, zafiros y diamantes.
En la foto: un capullo de oro y piedras preciosas.
Aunque las larvas de mosca Сaddis puedan parecer espeluznantes y repugnantes, es difícil negar la belleza de la creación resultante: una pequeña escultura de metal noble unida por seda.
Es asombroso hasta dónde llegan las invenciones de los artistas en busca de fama, inspiración y los laureles de la innovación artística. El oro es sin duda el mejor material para darles belleza, lujo y espectacularidad a sus obras.
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