El reloj Patek Philippe Supercomplication
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El Patek Philippe Henry Graves Supercomplication es un reloj de oro diseñado para sorprender y asombrar a la imaginación. Todo es único en él, desde las características del diseño hasta el precio por el cual se compró esta habilidosa creación en una subasta. La historia de la creación del reloj también es fascinante y merece atención.
Competencia entre empresarios aventureros
El reloj de bolsillo de oro de 18 quilates fue encargado por el banquero estadounidense y coleccionista apasionado Henry Graves Jr. Se cree que tuvo una rivalidad con el magnate del automóvil James Ward Packard. Ambos competidores buscaban hacerse con los relojes más complejos del mundo.
En la foto: Henry Graves Jr.
Para ganar, el banquero recurrió a Patek Philippe. La compañía suiza ya había creado previamente relojes intrincados e inusuales para Graves. Pero esta vez, el cliente necesitaba algo especial.
Se tardó ocho años en diseñar y producir el dispositivo. Graves invirtió unos 15 000 dólares en la producción, que hoy, ajustados a la inflación, son unos 250 000 dólares. Esta cantidad es casi cinco veces superior a la gastada por Packard.
Grandes gastos y años de arduo trabajo dieron sus frutos. En 1933, Henry Graves se convirtió en el orgulloso propietario de un reloj más complicado que cualquier otro del mundo. Este hecho se enfatiza en el nombre del artículo, donde está presente la palabra Supercomplication: supercomplicación.
Echemos un vistazo más de cerca a este objeto único
El Patek Philippe Henry Graves Supercomplication tiene dos esferas, una a cada lado.
El peso del reloj es de 536 gramos, el diámetro es de 74 milímetros, el grosor de la caja es de 36 milímetros.
El producto está ensamblado a partir de 920 piezas y, además de oro, contiene 70 piedras preciosas.
El modelo cuenta con 24 funciones que van mucho más allá de las capacidades de los relojes de esa época. Por ejemplo, con Supercomplication, se puede hacer un seguimiento de las fases de la Luna, el amanecer y el atardecer, e incluso la ubicación de las estrellas en el cielo de Nueva York.
Durante 56 años, este reloj se ha mantenido como el más complicado del planeta. No fue hasta 1989 que perdió terreno frente a nuevo Calibre 89 de Patek Philippe.
Más caro con cada subasta
Después de la muerte de Henry Graves en 1953, el extravagante reloj se mantuvo en la familia durante otra década y media, y luego pasó a ser propiedad de uno de los museos estadounidenses. En 1999, la institución cerró y un asombroso ejemplo de la artesanía de los relojeros suizos se puso a la venta en Sotheby's.
Por un monto récord de 11 millones de dólares, el dispositivo fue comprado por un jeque de Catar. El reloj fue prestado al Museo Patek Philippe y durante mucho tiempo se convirtió en su exposición más valiosa.
En 2014, Henry Graves Supercomplication volvió a estar bajo el martillo por una suma de dinero sin precedentes: 24 millones de dólares. Hasta el día de hoy, este récord en el precio entre los relojes de bolsillo no ha sido superado. Solo el reloj de pulsera Chime Ref. 6300A-010 de la misma Patek Philippe se vendió por una cantidad de dinero mucho mayor: 31 millones de dólares (2019).
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